(SONETO)
A LA SANTÍSIMA VIRGEN DE LA FUENSANTA,
PATRONA DE LAS CUATRO VILLAS
A
la imagen más bella conocida
Del Cielo Emperatriz, Madre de Dios,
Virgen de la Fuensanta, mi alma a Vos
De largo tiempo tengo ya rendida.
No
hay a Ti hermosura parecida,
Jamás criatura iguálese con Vos
Dulce Corredentora, Madre, ampáranos
Pues por el Eterno fuiste escogida.
Renueva
en nuestras almas Gran Señora
Aquel milagro de la reina mora
Que amparo y protección a Ti pedía.
Un
perfecto quehacer en cada hora
Nos traiga con tu gracia bienhechora
La luz a nuestras almas, ¡Madre mía!